En todo salón de clases la gestión de conductas puede ser uno de los retos más complejos, es normal que los estudiantes pasen por momentos difíciles y que algunos días en el aula sean difíciles, sin embargo de vez en cuando nos topamos con alumnos cuyo comportamiento es más desafiante de lo común, que en más de una ocasión parecen simplemente querer ir en contra nuestra y que cambian la dinámica del aula por completo.
Es importante recordar que cada conducta tiene una razón detrás de ella y que muchas veces se trata de solucionar algunas problemáticas más que enfrentarnos a los alumnos constantemente. También es importante recalcar que el conflicto en el aula nunca es personal, los estudiantes no buscan herirnos a nosotros, están reaccionando a algo que les ocurre y no han obtenido las herramientas necesarias para regular su conducta.
Aquí hay algunas ideas para que el aula se mantenga serena y que los docentes no pierdan nunca la paciencia.
Conecta con ellos
Conocerlos mejor y que ellos lleguen a entender que son importantes para ti como personas es esencial para mejorar la relación con cualquier estudiante y en el caso de alumnos que tienen dificultades para seguir instrucciones o respetar a la autoridad, es aún más importante, pues muchas veces su conducta se vuelve una barrera para crear vínculos que son esenciales para su desarrollo y al perderlos se sienten aislados así como aún más propensos a desobedecer o discutir.
Vive en el presente
Evita traer al presente cuestiones del pasado. Cada día es un nuevo día y si un estudiante siente que sus errores de días pasados los persiguen continuamente se les hará muy difícil esforzarse en el día a día para ser mejores, pues sentirán que no importa lo que hagan ya pesa sobre ellos una etiqueta de la que no pueden salir.
A los adultos nos cuesta olvidar ciertos detalles y es común que al frustrarnos con alguna situación traigamos a colación actitudes o comportamientos que vivimos en el pasado con los alumnos. Es importante centrarnos en el presente y siempre resolver la situación que se presenta, darle un cierre a todas las conversaciones y hacerle saber a los estudiantes que lo que sea que haya ocurrido ya pasó.
Expectativas claras
Hazle saber a tus alumnos cuál es la expectativa para cada actividad. Si los alumnos tienen una idea clara de lo que se espera de ellos ante momentos específicos del día les será más sencillo concentrarse y se sentirán más seguros. Sabrán qué es lo que tienen que cumplir, por cuánto tiempo se pretende que tengan ciertos comportamientos y cuál es el resultado que deben entregar cuando se trata de tareas o actividades específicas.
Para muchos estudiantes sus problemas de conducta están relacionados con la falta de regulación, ya sea emocional o de estímulos y la incertidumbre sobre las tareas puede aumentar esa sensación de ansiedad que los lleva a actuar de manera impulsiva. Puede parecer que esto suena exagerado, pues los estudiantes saben de qué trata el día a día, sin embargo actividades distintas, aunque sean similares entre sí, implican conductas distintas y resultados diferentes, así que buscar ser lo más detallados posibles con respecto a lo que los alumnos requieren, sus actividades y los resultados esperados tal vez sea necesario.
Procura darles opciones
Algunos niños y jóvenes sienten naturalmente una aversión a recibir órdenes, la sensación de estar obligados a realizar cierta acción los hace sentir limitados y desregulados, por lo que tratar de darles opciones puede ayudar a que estos alumnos normalicen el hacer lo que deben hacer sin sentirse restringidos.
Esto no implica que puedan hacer lo que sea que ellos quieran, sino que puedan elegir entre cierta cantidad de opciones para voluntariamente llevar a cabo una acción, trata con cosas simples, por ejemplo, si un estudiante no ha ido a su lugar para empezar la clase, puedes ofrecerles que se sienten para escuchar la sesión o que permanezcan de pie al fondo del salón de clases. Esta estrategia puede funcionar en diferentes actividades y será útil para todos los alumnos.
¿Cuáles serían tus consejos para un maestro que está lidiando con estas dificultades en el aula? ¡Comparte con nosotros!