El verano suele ser una época esperada y deseada por los estudiantes, el fin de las clases y el ideal de libertad para disfrutar actividades que normalmente no se realizan durante las clases puede ser una fuerte motivación para anhelar su llegada.
Sin embargo, especialmente tras la pandemia, las vacaciones pueden ser complicadas para algunos estudiantes, que de pronto vuelven a casa sin el apoyo de la estructura que ofrece la escuela y en ambientes complejos, que pasan mucho tiempo solos en casa, que se encuentran en contextos hostiles, horas de aburrimiento que fácilmente pueden fomentar el desinterés de los alumnos por la escuela.
¿Qué podría ayudar a los estudiantes a tener mejores vacaciones? Si bien no podemos influir mucho en la vida de los alumnos, podemos hacer algunas sugerencias a los padres, especialmente a los más ocupados, para que construyan unas vacaciones saludables, agradables y a la altura de las expectativas de los más pequeños.
La necesidad de estructura
Uno de los grandes beneficios de las escuelas está en la estructura, la predictibilidad del ambiente, los horarios organizados, las actividades constantes y bien delimitadas, todo esto suele perderse en vacaciones, los horarios para dormir y levantarse cambian por completo, la hora de almorzar, las comidas, las actividades se extienden por muchas horas o no existe ninguna delimitada durante el día. Si bien es bueno tener algunos días de absoluto descanso, también es necesario darle cierta estructura a la rutina de vacaciones.
Las familias pueden apoyar a los niños y adolescentes con horarios simples, pero que les ayuden a mantener la estructura, dándole espacio a las actividades de disfrutan, al descubrimiento de nuevos intereses, etc. No se trata de controlar todo su día, paso a paso, simplemente de mantener una guía constante y confiable durante las semanas de receso.
La importancia de socializar
Debido a la pandemia la mayoría de los alumnos pasaron los dos últimos años con muy poca interacción social con sus pares o limitada únicamente a los miembros de su familia, esto sin duda ha traído diversas consecuencias y el retorno a las aulas ha ayudado a retomar el camino, poco a poco.
Las vacaciones pueden venir a interrumpir la saludable relación que muchos de nuestros alumnos han establecido ya con sus compañeros y obligarlos a entrar nuevamente en una situación de aislamiento. Por ello es importante que los padres apoyen a sus niños y adolescentes para encontrar espacios durante las vacaciones en los que convivan con otros, que conserven los vínculos afectivos con sus amigos y que enriquezcan sus círculos sociales.
Conectar en casa
Es común encontrar jóvenes que durante sus vacaciones pasan mucho tiempo solos o al menos sin la compañía de sus padres. Esto, claro, es debido a que el trabajo y las exigencias de la vida cotidiana mantienen ocupados a los adultos, pero también influye en la vida emocional de los más jóvenes.
No podemos cambiar la realidad de estas familias, pero podemos buscar algunas sugerencias plausibles que refuercen la conexión al interior de los hogares, proveer a los padres de algunas actividades puede ayudar a quienes tienen dificultades para lograr estos escenarios. Noches de juegos de mesa, salidas de fin de semana, conversaciones en las que medie la empatía y la escucha activa, todo eso puede ayudar a las familias a conectar mejor a pesar de las ocupaciones.
Autoconocimiento
Las vacaciones son una gran oportunidad para descansar, pero también para descubrir un poco más sobre nosotros mismos, por lo que motivar a los estudiantes a conocer un poco más de su personalidad, explorando sus intereses y practicando habilidades que muchas veces no tienen espacio durante las actividades escolares puede hacer de estas vacaciones un gran espacio.
Consultar la cartelera local puede ayudar a las familias a descubrir espacios de entretenimiento, pero también para encontrar nuevos intereses o explorar los ya conocidos. Bibliotecas, casas de cultura, museos, son espacios que suelen ofrecer talleres gratuitos o muy accesibles para niños y adolescentes.
¿Tus alumnos tendrán unas vacaciones interesantes? ¿Crees que guiar a los padres para construir semanas más estructuradas puede ayudar a los alumnos en su camino académico? Deja tus comentarios y comparte con nosotros.