El trabajo es una parte muy importante de nuestra vida, para los docentes dar clases no es solamente un trabajo de unas cuantas horas, es un estilo de vida, una vocación, la pasión nos mueve todos los días a las aulas, pero esto puede fácilmente llevarnos a un desequilibrio que afecte nuestra vida personal e incluso poco a poco, nuestra salud. El balance entre el ámbito laboral y las áreas personales de nuestra vida es muy importante, pero no siempre es fácil alcanzarlo.
¿Cómo lograr un equilibrio entre nuestra vida laboral y la vida personal? Aquí hay algunas ideas.
No siempre será igual
El equilibrio es diferente para cada persona y también puede ser cambiante. Hay momentos en los que algunas ocupaciones en casa requieren nuestra atención mientras que existen otros en los que algunas actividades relacionadas con el trabajo son muy importantes. Lograr un verdadero equilibrio requiere cierta flexibilidad, adaptarnos a lo que nos exigen los tiempos, para al mismo tiempo priorizar nuestra salud, física y mental.
Esto implica un constante análisis de la situación que vivimos y la capacidad de aceptar que no siempre podemos dar todo en todos lados, ni podemos hacer lo mismo que otros hacen. En ocasiones deberemos aceptar momentos de desequilibrio, evitar la culpa de dedicar más tiempo a alguna actividad y estar conscientes de que lo más importante siempre seremos nosotros mismos, no por caer en el egoísmo, solo para ser capaces de darle a otros y a nuestras tareas la energía que requieren. No es posible lograr el equilibrio perfecto, sin embargo podemos hacer que nuestro tiempo se distribuya de la mejor manera posible para estar saludables y no descuidar ningún aspecto.
Establece límites
Cuando todo parece importante es fácil perder los límites entre lo que es aceptable, saludable y lo que resulta demasiado, el trabajo suele absorber toda nuestra atención y tratar de ser flexibles con las ocupaciones del aula llega a arrastrarnos a otros horarios, espacios u ocupaciones que son agotadores. Antes de que esto ocurra es importante establecer límites claros. Respetarlos y apegarnos a ellos es esencial.
Dibuja una línea entre los horarios en los que puedes trabajar, los espacios en los que está bien realizar actividades relacionadas al trabajo y las actividades que ya no te corresponden. Esto no implica ser inflexible, hay labores, como la docencia, que no terminan en el aula, sino que requieren de otros esfuerzos para comunciarnos con los alumnos, los padres, revisar tareas, planear clases, etc. Pero hacer claros los horarios de labores nos ayudará a crear espacios libres de trabajo y respetar dichos límites nos hará sentir más tranquilos cuando las ocupaciones nos abrumen.
Organiza tu tiempo
Una larga lista de pendientes resulta muy abrumadora, nos hace sentir que no podemos detenernos bajo ninguna circunstancia o no podremos terminar con todos esos temas a medias, sin embargo es importante distinguir lo que es urgente y esencial, de lo que simplemente puede esperar. Esto nos ayudará a distribuir el tiempo que tenemos sin sentirnos abrumados por un solo aspecto de la vida cotidiana, organizar nuestro día con la intención de darle espacio a todo lo que es importante no implica agotar nuestra energía, simplemente ser más organizados y conscientes del lugar al que dirigimos nuestro esfuerzo
Tener una agenda o un horario estructurado nos ayudará a tener mayor consciencia de lo que hacemos diariamente y cómo podemos optimizar mejor nuestros días.
Busca nuevas actividades
Las responsabilidades cotidianas fácilmente absorben toda nuestra atención, al punto de hacernos olvidar que fuera del trabajo y las actividades en casa existe un mundo aparte, donde podemos desarrollar muchas otras habilidades, conversar con personas distintas a nosotros, conocer nuevos aspectos de nosotros mismos y sitios fuera de lo común. Hacer un espacio en nuestro apretado horario para dedicar nuestra atención y tiempo a algo distinto no solo nos ayudará a descansar y expandir nuestro horizonte, también añadirá una sensación de libertad en nuestro día, donde podemos desarrollar actividades completamente distintas de las que hacemos diariamente.
¿Cómo logras el balance entre el trabajo y la vida cotidiana? ¿Qué tips le darías a las personas que tienen dificultades con esto? ¡Comparte tus ideas con nosotros!