El proceso de aprendizaje no es un proceso sencillo, requiere de la participación de muchas personas y depende en gran medida de la colaboración entre todas las partes, los docentes, las familias y los propios estudiantes son un equipo con una misma meta: logra el aprendizaje. La desconexión entre alguno de estos ámbitos puede afectar en gran medida el éxito de nuestra misión y aunque hagamos todo lo posible en el aula para lograr que los alumnos alcancen sus metas, si en casa no tienen el apoyo que necesitan podría convertirse en un gran reto.
Para los padres y las familias de los estudiantes puede ser muy complicado el ayudar a sus niños en jóvenes en casa, pues muchas veces sienten que no cuentan con las herramientas para apoyarlos en sus tareas, en las sesiones de estudio o en cualquier otra actividad que necesiten para reforzar lo que ha ocurrido en el aula y es verdad muchos adultos no saben bien cómo abordar este aspecto, por lo que este proceso se puede dificultar mucho. Como docentes estar en comunicación con las familias y prestar atención a lo que pueden necesitar es tan importante como las actividades en clase.
¿Cómo podemos guiar a los padres para lograr esto? ¿Qué herramientas podemos darles?
Crear un ambiente apropiado en casa
Tener un lugar para estudiar sin distracciones y con las comodidades necesarias para hacer las tareas es clave, el aula se presta justamente para esto pero a veces en casa puede ser complicado encontrar ese espacio dedicado a la concentración. Es verdad que no todas las familias cuentan con el espacio y las características en casa que le ayuden a lograr esto, algunos alumnos acompañan a sus padres en horarios de trabajo o viven con otros familiares en casa, lo que dificulta esa transición, pero es necesario ayudar a los padres a buscar ese espacio, a construirlo tanto como se pueda y darle a los estudiantes la seguridad de que cuentan con las herramientas para estudiar, aunque estas no sean las que consideramos ideales, sino las que se adapten a nuestro entorno.
Podemos sugerir a los padres que si no cuentan con espacio dedicado a las tareas le permitan a los alumnos apropiarse del entorno común durante unas cuantas horas en el día para realizar sus tareas, que eviten las distracciones como la televisión o la charla de otros familiares, que cuenten con agua fresca para hidratarse y que puedan sentarse cómodamente para realizar sus tareas, aunque todo esto pueda tener sus variantes para cada familia estos factores son los principales en el tema.
Permitirles descansar
A veces pensamos que el aprendizaje se logra solamente a través del esfuerzo y que esto implica agotar nuestra energía con ese objetivo, lo cual en realidad puede convertirse en algo contraproducente, pues al estar cansados nuestra capacidad de aprender se agota fácilmente, exigir a los niños que pasen sus tardes continuamente estudiando y resolviendo sus tareas puede parecer la mejor forma de apoyar el trabajo en el aula pero si no consideramos la importancia del descanso y de cultivar el autocuidado esto será más un obstáculo que una forma de llegar a la meta.
Descansar es tan importante como desarrollar los intereses propios del estudiante, permitir que al salir de la escuela tengan un espacio para desarrollar su personalidad, para profundizar en las cosas que les interesan y para descansar apropiadamente es necesario, trata de hacerle ver a los papás que no todo se trata de las calificaciones o las tareas, también del bienestar de los estudiantes, que puedan desarrollar plenamente sus identidades y conocerse mejor en otros contextos, aunque las herramientas para resolver las tareas son necesarias, este otro aspecto también lo es.
Investigar junto con ellos
Es importante reconocer que no tenemos todas las respuestas, aunque seamos adultos y hayamos pasado antes por los mismos aprendizajes que los más jóvenes muchos conocimientos se han actualizado, los procesos ya no son los mismos y algunas cosas simplemente las desconocemos, cuando ellos acuden a nosotros para resolver sus dudas y no contamos con la respuesta correcta, con la explicación más apropiada o ignoramos el proceso que están pasando puede ser necesario investigar junto con ellos y aceptar que simplemente no lo sabemos todo.
Esto ayudará a los estudiantes a ver que no se trata de estar siempre en lo correcto o de conocerlo todo, sino de aprender a investigar y permitirnos descubrir nuevas cosas sin importar la edad que tengamos, además será de gran ayuda para su curiosidad, pues tendrán la oportunidad de profundizar en lo que han visto en clase.
Salir de casa y visitar lugares nuevos
Como padres o tutores de un estudiante es necesario proveer un ambiente rico para su evolución y aprendizaje, desde el interior de nuestra casa no podemos descubrir el mundo, por lo que ayudarlos a expandir su horizonte y llevarlos a conocer más allá de su entorno cotidiano es importante. Visitar las bibliotecas locales, conocer los museos de nuestra localidad, asistir a actividades culturales como conciertos, cine, teatro, danza, acudir a las ferias de libro, por ejemplo, puede ser de gran ayuda para expandir el mundo de nuestros niños y adolescentes, ayudarlos a interesarse por todos los temas, salir de su cotidianidad y descubrir otras expresiones no solo les hará pasar un buen rato, también les despertará curiosidad y ayudará a expandir su pensamiento crítico.
¿Qué herramientas crees que necesitan los padres para ayudar a sus hijos en casa? ¡Comparte con nosotros tus consejos e ideas!