“Tu síguele pidiendo. Ya que lo paguen otros”. La deuda externa es una deuda pública en donde un país le pide dinero, mercancías y bienes generales a bancos, gobiernos, proveedores u otros que residen en el extranjero. Dichos préstamos, bajo ciertas condiciones, beneficia a ambas partes (a veces más benéficas para una que para la otra). La deuda externa en esencia no incumbe al Estado ya que estos préstamos se realizan para mantener o desarrollar la economía del país que los solicita, esta deuda le compete a su población.