De cara al fin de ciclo, nos enfrentamos a cambios, emociones y expectativas que pueden hacer que la gestión del aula en las últimas semanas un poco más complicada que en otros momentos del año, algunos alumnos sentirán estrés por mejorar sus calificaciones, por entregar trabajos atrasados o veremos que la apatía por terminar las actividades se vuelve más intensa, poco a poco todo el grupo puede ponerse más inquieto y nosotros mismos podemos sucumbir a la presión de las evaluaciones, los cierres de temarios y los eventos asociados a este momento.
Atravesar esta temporada puede ser un reto, pero también una oportunidad para trabajar con los alumnos y ayudarlos a prepararse tanto para terminar el año como para iniciar su siguiente ciclo. No es necesario cerrar actividades como si no pasara nada, por el contrario, hacerle espacio a las emociones e ideas que vienen con este suceso puede ayudarnos a crear un ambiente más amable para todos.
¿Qué podemos hacer en esta época del año?
Hacer espacio para las conversaciones
El final del ciclo escolar, el inicio del verano, trae consigo muchas ideas y emociones en los alumnos, algunos tienen grandes expectativas para sus vacaciones, mientras otros empiezan a sentirse nerviosos por los cambios que se avecinan, no todos experimentan esta temporada de la misma manera, pero lo más probable es que todos tengan algo que decir al respecto y escuchar a sus compañeros puede ayudarles a gestionar sus emociones y abrirse a nuevas perspectivas.
Crea espacios adecuados y amigables donde los alumnos puedan expresar libremente sus pensamientos al respecto, desde la emoción por las vacaciones hasta sus temores ante el ciclo que pronto comenzará.
Busca que tus alumnos colaboren mucho más entre ellos
Algo común ante la inminencia de las vacaciones es que la atención y concentración en el aula se dispersan mucho, es probable que tengamos un grupo que piensa mucho más en las vacaciones de verano que en sus resultados del último examen. No es fácil mantener la energía atenta en el salón de clases, pero buscar que los alumnos se vinculen más entre ellos, aprendan unos de otros y colaboren en equipo puede ayudar a mantener la concentración mucho más activa, pues sus actividades no seran solamente propias, tendrán la oportunidad de acercarse a sus compañeros y se involucrarán mucho más con el trabajo de la clase y sus tareas.
El fin de año es una buena oportunidad para implementar sistemas de asesoría entre los propios compañeros, así como para proponer proyectos en equipo.
Evita la frustración
Las últimas semanas puede ser mucho más complicado cumplir con nuestras metas planteadas para cada clase, muchas veces los propios estudiantes tienen ideas muy diferentes sobre lo que esperan de la clase, todo esto puede resultar estresante para el docente, además de muy frustrante.
No puedes ir contra la corriente, la emoción del verano es inevitable, quizá es mucho mejor idea buscar que el fin de ciclo se acomode a sus necesidades y ser flexibles tanto con nuestras expectativas como con las suyas.
Permite que la emoción por el verano llegue a tu aula, hagan de esto la meta final, construyan proyectos juntos y aproxímense a las vacaciones con optimismo en lugar de sumar estrés.
Haz actividades que les ayuden a cerrar este ciclo
Aunque para nosotros se trate de un ciclo más por cerrar, para los estudiantes se trata de una etapa de su vida. Recuerda que para ellos todo es novedoso y cada año está lleno de primeras experiencias. Esto puede traer muchas alegrías pero también fuentes de ansiedad, estrés y hasta tristeza. Ayudarlos a enfrentar los cambios y el cierre de ciclos puede ser muy útil para ellos, así como para el ambiente de la clase, no solo se trata de temas personales, también de sus metas escolares.
Haz que reflexionen sobre lo aprendido
Puedes crear actividades en las que reflexionen sobre todo lo que han aprendido en el año, tanto en el aula como en sus vidas, esto puede ser una gran oportunidad para repasar los contenidos de meses atrás y para hacerles ver lo mucho que han crecido, aunque a veces no lo vean así.
Metas para el futuro
Ayúdales a diseñar metas para el futuro, tanto para las semanas que se aproximan como para el siguiente ciclo escolar, esto transformará la ansiedad por lo desconocido y la presión del fin de año en expectativa y optimismo.
¿Qué consejo te darías?
Puedes sugerirles que imaginen un escenario en el que se encuentran con su yo del pasado, así ellos podrán ver lo mucho que han crecido y las cosas que han aprendido mientras se divierten con todo lo que su imaginación les traerá.
Organiza charlas con grupos más grandes
El cambio de ciclo puede ser una gran oportunidad para promover vínculos en toda la comunidad escolar, buscar que los alumnos hablen con sus compañeros de otros grados traerá un importante intercambio de perspectivas, experiencias e ideas. Así como la oportunidad de celebrar su propio crecimiento.
¿Qué cambios notas en los estudiantes cuando se aproximan las vacaciones? ¿Tienes alguna estrategia para estas semanas? ¡Comparte con nosotros!