En la era digital, el acceso a un celular se ha convertido en una parte casi inevitable de la vida de los jóvenes, todos quieren estar presentes en redes sociales y ser parte de fenómenos virales, sin embargo, decidir cuándo es el momento adecuado para darle a un joven su primer celular personal puede ser un desafío para los padres e incluso un tema constante en los salones de clase. Por un lado, muchos padres necesitan que los jóvenes puedan comunicarse y saben que para ellos es importante sentirse parte del grupo, pero por otro lado sabemos que existen riesgos asociados al uso de redes y dispositivos digitales que pueden afectar desde el aprendizaje de sus hijos hasta ser un factor de riesgo para su autoestima.
¿Cómo tomar esta decisión? ¿En qué momento es correcto que un niño o un adolescente tenga acceso a su primer celular? ¡Aquí te dejamos algunas ideas para tomar una decisión informada y equilibrada!
Cada persona es distinta
Es muy importante considerar al niño o joven en cuestión como una persona individual y evitar que la presión social tome decisiones por nosotros, así como considerar el desarrollo personal de nuestro alumno, hija o hijo. ¿Qué tanto comprende la importancia de las reglas y se apega a ellas? ¿Cómo es su relación con sus compañeros? ¿Cómo ha sido el desarrollo de su autoimagen? La madurez para gestionar el uso de dispositivos digitales no siempre está ligada a la edad, por lo que es importante observar su comportamiento y capacidad para tomar decisiones responsables.
¿Es necesario?
A veces, más allá del uso de redes sociales, la presencia de juegos o de aplicaciones en particular, está el contexto del joven y de su familia. Para muchos padres es importante estar en comunicación con sus hijos porque no pueden estar presentes en momentos como la salida de la escuela o si ocurre una emergencia en sus traslados. Considerar estos aspectos en su vida personal, así como planes alternos bien diseñados para comunicarse en caso de emergencia podrían ser factores para tomar esa decisión.
Tener límites claros
Antes de darle un celular, es crucial establecer reglas claras sobre su uso. Esto incluye límites de tiempo, aplicaciones permitidas, y expectativas sobre el comportamiento en línea. Hablar sobre la importancia de la privacidad, de la ciudadanía digital y de comprender que lo que se publica en línea es como si se dijera en la vida real, así como el tiempo de uso es muy importante para evitar un uso inadecuado de los dispositivos. Como padres, también debemos considerar controles parentales para monitorear su actividad y evitar el acceso a contenido inapropiado.
Ciudadanía digital
Un celular no es solo un dispositivo, es una puerta a un mundo de información y comunicación. Es esencial estar al tanto de los riesgos asociados con el uso del celular, como el ciberacoso, la privacidad en línea, y la adicción a las pantallas. Es importante ayudarles a ser usuarios responsables y conscientes, su privacidad, sus datos personales y las conexiones que generan tienen alcances que no siempre perciben con claridad.
Escuchar a los jóvenes
Involucrar al joven en la conversación sobre cuándo y por qué debería tener un celular puede ser muy beneficioso. Esto no solo les hace sentir parte del proceso, sino que también les da la oportunidad de expresar sus necesidades y preocupaciones. Juntos, pueden establecer expectativas realistas y acordar un plan de uso.
Decidir el momento más adecuado para que un joven tenga acceso a un teléfono puede ser complejo, como padres y docentes buscamos protegerlos, pero también apoyarlos en su desarrollo. No hay una edad "correcta" universal, pero con una evaluación cuidadosa y una comunicación abierta, los padres pueden tomar una decisión que beneficie tanto al joven como a la familia. ¿Qué consejo le darías a los padres que están por tomar esa decisión? ¿Cuáles son las políticas en tu escuela o en tu aula al respecto? ¡Comparte con nosotros tus ideas!