Todos amamos las vacaciones, descansar y dejar de lado la rutina cotidiana es importante para nuestra salud, física y mental, por lo que estas pausas son más que necesarias. Sin embargo regresar a nuestras actividades diarias puede resultar un reto después de algunos días de descanso, tanto para los más jóvenes como para los mismos adultos, retomar el ritmo en las aulas después de los días de fiestas puede ser una misión compleja. 

Es posible que los primeros días nos encontremos con un aula distraída, con pocas ganas de trabajar y sin intenciones de poner atención a lo que vemos en clase. ¿Cómo ayudar a los alumnos a volver con total atención al aprendizaje? 

Entender el cambio

No es sencillo. Volver de una rutina de descanso a las aulas, exigirle a la mente y al cuerpo la atención necesaria para estar en silencio, concentrados y dispuestos al aprendizaje implica un reto. Ser comprensivos con los alumnos y con nosotros mismos puede ser muy importante para alcanzar un mejor ambiente de trabajo en las aulas, uno que evite la confrontación a pocos días de iniciado el año y que busque más soluciones que problemas. 

Comienza con calma

Tanto los alumnos como nosotros mismos necesitamos pasar por un periodo de re-adaptación, los cambios abruptos no son sencillos para nadie y pasar de las vacaciones a un horario completo puede ser mucho más complicado de lo que parece, especialmente si dejamos en casa juguetes, familiares, dispositivos digitales o cualquier otro aspecto de la comodidad en casa que en la escuela no podremos tener. 

Iniciar con calma, tratar de ser flexibles con los estudiantes y hacer de los primeros días un proceso de adaptación en sí mismo puede ser mucho mejor idea que pretender iniciar con un horario complejo, lleno de actividades y temas nuevos. Dales tiempo al inicio del día para conversar entre ellos, tienen muchas aventuras que contarse,  incluso puedes hacer de esto una actividad grupal y abrir el espacio para que compartan sus experiencias de vacaciones, sentir que el aula es un espacio cálido que los escucha puede cambiar las cosas. 

Crea buenas expectativas

Comenzar el año con grandes expectativas para lo que viene ayudará a los alumnos a situarse más fácilmente en un ambiente escolar, procura trabajar con ellos sus metas para el futuro, su idea de un año exitoso y ajusta los objetivos de la clase de forma colectiva, esto puede ayudar a los alumnos a sentir que el aula no es solamente un espacio ajeno en el que tienen que trabajar, sino un espacio propio, colectivo, en el que su voz es tomada en cuenta y en el que pueden aportar sus ideas, sus opiniones y cambiar las cosas. 

También tener en mente una meta grupal, sumada a metas personales en las que expresen sus ideas puede ayudar a aumentar la motivación para trabajar en clase, de lo contrario sentirán que todo lo que pasa es algo que se les exige, más que algo en lo que ellos tienen opciones. 

Inicia con un repaso

Sin importar qué tan aplicados sean los alumnos los primeros días de clase es normal que se sientan un poco perdidos, la mayoría no repasa en casa durante las vacaciones e incluso si lo hace es probable que los últimos temas vistos en clase, así como la práctica de ciertos ejercicios simplemente no esté al frente en su lista mental de conocimientos. Inicia con algunos ejercicios ligeros para calentar motores y con un repaso que traiga a la superficie todo lo que han aprendido. Puedes hacer de estos repasos un juego, en el que motives a los alumnos a participar en pequeñas competencias o en el que añadas algunos rasgos divertidos, lo que ayudará a facilitar la transición entre vacaciones y escuela.

Haz pausas frecuentes

La atención es un recurso finito, muchos alumnos llegarán más distraídos que de costumbre, algunos muco más reticentes a poner atención al aula, por ello hacer pausas constantes entre las actividades que tengamos planeadas, los ejercicios y los temas para ver en clase es necesario. Permite que se levanten de sus asientos, que utilicen su voz, que estiren sus músculos, esto beneficiará mucho a la concentración y facilitará el proceso en sí mismo. 

¿Has notado aulas más dispersas al volver de vacaciones? ¿Crees que es necesario formular estrategias para los primeros días de clase? ¡Comparte tus ideas y consejos con nosotros para este inicio de año!