Aunque el foco de nuestras clases sea el conocimiento y las habilidades académicas, la parte social es uno de los elementos más importantes en la vida de los estudiantes, que además puede tener un efecto profundo en su rendimiento, su gestión emocional y su comodidad en el aula. Para algunos alumnos el aspecto social es el más divertido y fácil del día a día, pero para otros puede llegar a ser un reto, además todos los estudiantes, en algún momento, enfrentan días complicados y situaciones extraordinarias en las que no saben cuál es la mejor ruta para aproximarse a un amigo nuevo, a un amigo que la está pasando mal o cómo resolver un conflicto.
Todas estas experiencias son difíciles incluso para los adultos, por lo que ayudar a los alumnos a fortalecer sus habilidades sociales puede ser mucho más importante de lo que nos imaginamos, además la interacción con otras personas a través de vínculos positivos es algo que les será útil toda la vida.
Utiliza historias
Sin importar la edad de nuestros estudiantes, tener a la mano historias en las que los personajes enfrenten situaciones que de alguna manera se relacionan con lo que estamos viviendo puede ser de gran utilidad en muchos aspectos de la vida cotidiana. Analizar con ellos narrativas en las que los personajes tengan que resolver problemas como los que enfrentan en su día a día, aunque sea en escenarios ficticios, les dará herramientas y les ayudará a sentirse más seguros cuando algo nuevo se presente, pues no será enteramente desconocido. Esto incluye las relaciones sociales.
Todos somos distintos
Es muy importante aprender que la diversidad es la única constante en nuestra realidad, aunque nosotros pensemos que algo es obvio y común para otras personas la realidad es sencillamente distinta. Hacer conscientes a los alumnos de que las perspectivas personales pueden ser muy distintas para cada individuo puede ayudar a resolver problemas de comunicación, pues muchas veces las diferencias de opiniones son también diferencias en las experiencias que se han vivido y la realidad que enfrentan.
La empatía es una habilidad esencial para las relaciones sociales, así como la comunicación directa, el preguntar al otro qué y cómo le funciona mejor comunicarse y buscar acuerdos en los que todos nos sintamos cómodos para relacionarnos puede ser un gran inicio al enfrentar problemas.
Juegos colaborativos
El juego puede ser un espacio extraordinario para practicar distintas habilidades sociales y ayudarnos a conectar con otras personas, jugar con los alumnos con dinámicas en las que tengan que practicar aspectos como el trabajo en equipo, la comunicación asertiva, esperar turnos y organizar estrategias en un ambiente divertido y seguro puede ayudar a quienes tienen dificultades para conectar con otros, así como a enfrentar situaciones sociales en una especie de ensayo, aunque el juego despierte diferencias entre los participantes, es necesario recordarles que el juego es solamente pasajero e intrascendente.
Autoestima y seguridad
Aunque tengamos dificultades para acercaros a otros y mantener nuestras relaciones, es muy importante siempre saber que nuestro valor como personas no cambia ni puede ponerse en duda, ayudar a los alumnos a sentirse seguros de sí mismos puede ser una gran herramienta para enfrentar sus dificultades sociales con seguridad y facilidad, pues sabrán que incluso si algo no sale bien, esto no quiere decir nada sobre ellos mismos, sino de algo que pueden practicar y mejorar.
¿Cómo ayudas a tus alumnos a enfrentar situaciones sociales? ¿Crees que este aspecto es importante para las aulas?