La palabra ofrenda proviene del latín offerenda que significa “cosas que se han de ofrecer”, por lo que la ofrenda es un regalo que se da como un reconocimiento, un acto de gratitud o de veneración.
Las ofrendas tienen una connotación religiosa, por ejemplo, en las misas católicas se dan ofrendas a la Iglesia como representación de compartir con alegría parte de tu riqueza a la casa de Dios.
Se sabe que las ofrendas a los dioses se daban desde el antiguo Egipto y también en las culturas prehispánicas.
Actualmente, en nuestro país, es una tradición en las festividades del Día Muertos poner una ofrenda en las casas para recordar a los familiares o amigos queridos que han fallecido.
En algunas regiones del país comienzan a ponerse el día 28 y, día a día, se agregan más elementos. De acuerdo a la tradición, el 1° de noviembre se coloca la comida dulce, al igual que las flores de cempasúchil y el día 2 se coloca la comida preferida de los difuntos y una cruz de flores. En general, las ofrendas están compuestas por las fotos de los familiares a los que se honra, se adornan con papel picado, calaveritas de dulce o chocolate, veladoras y comida.
Originalmente, la ofrenda debe ser de siete niveles, pero generalmente es de tres y estos representan la tierra, el cielo y el inframundo o purgatorio.
Cada elemento que se integra a la ofrenda tiene un significado, estos pueden variar dependiendo de la tradición del lugar, entre ellos destacan: