“Las armas nacionales se han cubierto de gloria. Las tropas francesas se portaron con valor en el combate y su jefe con torpeza”. Ignacio Zaragoza
El general Ignacio Zaragoza tenía solo 32 años cuando tomó la jefatura del Ejército de Oriente para detener la marcha de los franceses sobre la capital.
La intervención francesa en nuestro país se debió, entre otros factores, a la Guerra de Reforma la cual fue un conflicto entre liberales y conservadores. Al cabo de tres años (1861) ganaron los liberales representados por Benito Juárez.
Al finalizar el conflicto, nuestro País estaba en quiebra y con una enorme deuda que los Conservadores contrataron con banqueros de Francia, Inglaterra y España. El presidente Benito Juárez declaró el 17 de julio de 1861, una moratoria de dos años en el pago de deudas a prestamistas extranjeros y en octubre de ese mismo año, Francia, Inglaterra y España acordaron intervenir la República para exigir el pago de sus deudas.
Es importante mencionar, que un grupo de mexicanos exiliados en Francia, enemigos de los liberales, solicitaron a Napoleón III que extendiera su imperio a tierras mexicanas.Y es así como comienza la intervención francesa.
Ante la inminente invasión, el Presidente Benito Juárez crea al Ejército de Oriente con apenas 2,000 hombres y designa al mando de éste al General Ignacio Zaragoza. Así pues, el 5 de mayo de 1862, se enfrentaron por horas al ejército francés liderado por el sanguinario Charles Ferdinand Latrille, Conde de Lorencez, finalmente se ganó la batalla con un saldo de más de 500 decesos en las filas francesas y 100 en las mexicanas.
El general Ignacio Zaragoza tenía 32 años cuando dejó el Ministerio de Guerra para tomar la jefatura del Ejército de Oriente y detener la marcha de los franceses sobre la capital. Tres meses y tres días después de la Heroica Batalla de Puebla, moriría de fiebre tifoidea.