Para este año 2021, el lema de la campaña del Día de los Derechos Humanos es: Igualdad, ya que hace referencia al primer artículo de la Declaración Universal.
El concepto de igualdad se alinea con la agenda 2030 y el enfoque de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) de no dejar a nadie atrás.
Igualdad, inclusión y no discriminación están en el centro del discurso de este año, protegiendo a los grupos más vulnerables: niños, mujeres, pueblos indígenas, personas LGBTI, migrantes, personas con capacidades diferentes.
Y la igualdad debe aplicarse cumpliendo este mandato: "Reconstruir mejor, más justo y más verde" con los objetivos siguientes:
La Declaración Universal de los Derechos Humanos
"Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos" Es el texto del artículo 1 de la Declaración Universal de Derechos Humanos. La Declaración proclama los derechos inalienables inherentes a todos los seres humanos, sin importar su raza, color, religión, sexo, idioma, opiniones políticas o de otra índole, origen nacional o social, propiedades, lugar de nacimiento ni ninguna otra condición.
En 1948, la Asamblea General de las Naciones Unidas adoptó la Declaración Universal de Derechos Humanos, proclamando sus principios como “un ideal común para todos los pueblos y naciones”.
En 1994, la Asamblea de las Naciones Unidas mandató al Alto Comisionado para los Derechos Humanos como el principal organismo de derechos humanos de las Naciones Unidas responsable de promocionar y proteger los derechos humanos en todo el mundo.
Esta figura surge de la recomendación realizada por los delegados que asistieron a la Conferencia Mundial de Derechos Humanos celebrada en 1993 en Viena. En esta se aprobó la Declaración y el Programa de Acción de Viena, con lo que se dio inicio a la difusión sobre el respeto a los derechos humanos en el mundo.
Actualmente, muchos gobiernos y organizaciones sociales implementan instrumentos y mecanismos para asegurar la supremacía de los derechos humanos y para enfrentar las violaciones a este precepto fundamental para la sana convivencia.