Luis Ernesto Miramontes Cardenas nació en Tepic, Nayarit el 16 de marzo de 1925 y falleció en la Ciudad de México el 13 de septiembre del año 2004.
Su infancia estuvo marcada, primero por la ausencia de su padre quien, de acuerdo a sus biógrafos, era un político importante de la época y se negó a reconocerlo y segundo por la influencia de una de sus tías, María Dolores Cárdenas, quien se encargó de su educación y lo motivó por la ciencia. Gracias a una beca, Miramontes pudo ingresar en la Escuela Nacional Preparatoria, en Ciudad de México.
Gracias a una beca pudo estudiar en la Ciudad de México, en la Escuela Nacional Preparatoria de San Ildefonso, después ingresó a la Escuela Nacional de Ciencia Químicas de la UNAM donde concluyó la carrera de Ingeniería Química.
Poco tiempo después de salir de la Universidad comenzó a trabajar en la empresa Syntex. Allí, con solo 26 años, realizó el descubrimiento más importante de su trayectoria: sintetizar la noretisterona, la base de la primera píldora anticonceptiva.
Su descubrimiento es considerado por diversas organizaciones científicas como uno de los más importantes del siglo XX y a su vez a Miramontes se le reconoce como uno de los tres químicos mexicanos más trascendentes de la historia.
El hallazgo cambió la vida de millones de mujeres en el mundo, sin embargo en nuestro país la sociedad conservadora y la comunidad católica no aceptaron este descubrimiento, sino hasta los años 70 en los que los reconocimientos a su descubrimiento comenzaron a llegar.
Su labor científica incluye más de 40 patentes en diversos campos. Igualmente, fue docente en la Facultad de Química de la UNAM.
En 1972 trabajó como Jefe de División de Investigación de Procesos Petroquímicos en el Instituto Mexicano del Petróleo y años más tarde fue Jefe de una planta piloto que buscaba desarrollar la tecnología necesaria para industrializar la producción de los esteroides de la yucca, era un encargo conjunto de la Comisión Nacional de las Zonas Áridas y del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología.
En 1977 se hizo cargo de la jefatura de la División de Agroquímica del Instituto Mexicano del Petróleo. El resto de su carrera la desarrolló en ese mismo organismo hasta 1993.
Sus últimos años en activo los pasó en el Colegio Nacional de Ingenieros Químicos, donde ejerció de Director de Operaciones. Luis Miramontes Cárdenas murió en la Ciudad de México el 13 de septiembre de 2004 a la edad de 79 años.
Por sus aportes a la ciencia y a la humanidad, Miramontes Cárdenas apareció en el USA Inventors Hall of Fame al lado de Louis Pasteur, Thomas Alva Edison, Alexander Graham Bell, los hermanos Wright y otros científicos e inventores de igual talla.
Miramontes es considerado uno de los científicos más importantes en la historia de la humanidad. Su extensa obra es la mayor contribución de la ciencia mexicana al mundo.