La Organización de las Naciones Unidas (ONU), reitera que en 2020, la juventud mostró su apoyo en las marchas de Black Lives Matter, que atrajeron a millones de manifestantes en todo el mundo. En las calles, los jóvenes —en su mayoría adolescentes y veinteañeros— se unieron para protestar contra la injusticia racial. En las redes sociales, movilizaron la participación para manifestarse públicamente y a defender la igualdad de derechos.
Su activismo se hizo más palpable en el contexto de la pandemia por COVID-19, que provocó restricciones de las reuniones públicas en muchos países. Cuando el virus comenzó a propagarse a principios de 2020, se desató una pandemia paralela de odio, violencia y miedo contra ciertas etnias y nacionalidades. Asimismo, se hizo evidente que las graves desigualdades, a veces arraigadas en el racismo, ponía a las minorías en un mayor riesgo de infección y muerte.
La pandemia por COVID-19 ha tenido un gran impacto en la juventud, incluidos los jóvenes que pertenecen a los grupos minoritarios. Muchos de ellos se ven afectados por un aumento de la discriminación racial, por la interrupción de su educación, o que tienen menos perspectivas de empleo y una limitada capacidad para participar en la vida pública, lo que obstaculiza su empoderamiento individual y social.
En 1966, la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) estableció el 21 de marzo como el Día Internacional de la Eliminación de la Discriminación Racial, ya que en esa fecha pero de 1960 la policía mató a 69 personas en una manifestación pacífica contra las leyes de pases del apartheid que se realizaba en Sharpeville, Sudáfrica.
La ONU busca sensibilizar y concientizar de que existe un problema sin resolver, un asunto importante y pendiente en las sociedades, que los gobiernos y los estados deben de actuar y tomar medidas o bien que los ciudadanos lo exijan a sus gobernantes.
La lucha contra el racismo es una prioridad para todos los países del mundo, pertenezcan o no a la ONU, y desde 1966 es unas de las principales preocupaciones de de la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos.
¡Fomentemos entre los niños y adolescentes el respeto por los demás!