La ONU Mujeres asegura que casi 1 de cada 3 mujeres ha sufrido abusos a lo largo de su vida. En tiempos de crisis las cifras aumentan, como se vio durante la pandemia de COVID-19 y las recientes crisis humanitarias, conflictos y desastres climáticos.
Un nuevo informe de ONU Mujeres, respaldado por información de 13 países desde la pandemia, muestra que 2 de cada 3 mujeres padecieron alguna forma de violencia o conocían a alguna mujer que la sufría. Por desgracia, sólo 1 de cada 10 denuncia ante las autoridades. A su vez, estas mujeres tienen más probabilidades de enfrentarse a situaciones de pobreza y escasez de alimentos.
La violencia de género es generalizada y esta puede y debe prevenirse. Para detener la violencia es relevante adoptar enfoques integrales e inclusivos que aborden las causas fundamentales, transformen las normas sociales dañinas y empoderen a las mujeres y a las niñas. Con servicios esenciales en los sectores policial, judicial, sanitario y social, y con presupuesto suficiente para la lucha por los derechos de las mujeres, podremos poner fin a la violencia de género.
La violencia contra mujeres y niñas es una de las violaciones de los derechos humanos más extendidas, persistentes y devastadoras del mundo actual sobre las que apenas se informa debido a la impunidad de la cual disfrutan los perpetradores, y el silencio, la estigmatización y la vergüenza que sufren las víctimas.
En forma general, la violencia se manifiesta de forma física, sexual y psicológica e incluye:
¿Por qué en esta fecha?
Las Hermanas Mirabal, activistas políticas de la República Dominicana fueron brutalmente asesinadas por órdenes del gobernante Rafael Leónidas Trujillo el 25 de noviembre de 1960.
Militantes y activistas en favor del derecho de la mujer de varias partes del mundo retomaron esta fecha desde 1981 como un día de protesta contra la violencia que sufre la mujer.
De acuerdo a los informes de la UNESCO, el cambio climático y la pobreza son factores que inciden en la violencia contra las mujeres y niñas.
El cambio climático es un multiplicador de amenazas, ya que es una de las causas en el descenso en la producción de alimentos en el mundo, lo que a su vez provoca migraciones y por ende problemas económicos en las familias.