En 1812 José Miguel Ramón Adaucto Fernández Féliz se unió al ejército insurgente comandado por Hermenegildo Galeana y fue cuando decidió cambiar su nombre a Guadalupe Victoria en honor a la Virgen.
Aún y cuando los insurgentes se debilitaron ante la muerte de José María Morelos y Pavón, fue Guadalupe Victoria quien continuó con la lucha y apoyó el Plan de Iguala firmado por Agustín de Iturbide y Vicente Guerrero.
Después de que Agustín I, abdicó, el Congreso formó un gobierno provisional integrado por Nicolás Bravo, Guadalupe Victoria y Pedro Celestino Negrete. Este Congreso decidió adoptar un sistema federal y expidió el Acta Constitutiva de la Federación.
El Congreso dio inicio a los trabajos electorales para nombrar al primer presidente de la república. Los candidatos eran quienes en ese momento ejercían provisionalmente el poder ejecutivo y se decidió por Victoria y Nicolás Bravo como vicepresidente.
La presidencia de Guadalupe Victoria duró del 10 de octubre de 1824 al 1 de abril de 1829, siendo la primera constitucional y que se distinguió por ser estable. Entre los logros de Guadalupe Victoria como presidente, destaca que consiguió que Chiapas retornara a formar parte de México y que Estados Unidos aceptara los límites de su frontera con nuestro País.