Nació el 16 de diciembre de 1909 en Toluca, Estado de México. Fue hija de Manuel Zendejas Martínez a quien se considera pionero de la lucha por la nacionalización de los ferrocarriles, y Carmen Gómez.
Adelina Zendejas fue maestra, periodista, activista y además precursora del feminismo, de la educación indígena y del cambio cultural en México.
Sus biógrafos mencionan que en su infancia vivió con carencias económicas. Desde los catorce años, mientras estudiaba, comenzó a trabajar dando clases particulares, cosiendo, ayudando en la cocina de un restaurante, cocinando y lavando platos.
Su activismo social y feminista inició con su ingreso a la Escuela Nacional Preparatoria de San Ildefonso como parte de aquel primer grupo de mujeres admitidas en 1922.
Los que la conocían bien, mencionan que igual se juntaba con los más estudiosos de la preparatoria o los cachuchas, donde se hizo amiga de Frida Kahlo, amistad que duró hasta la muerte de la pintora. Adelina Zendejas andaba por la preparatoria con el cabello trenzado y le llamaban La potranca debido a su personalidad determinada, potente y, sobre todo, inteligente.
Con 19 años ingresó a la Universidad Nacional en la Ciudad de México, donde cursó en la Facultad de Filosofía y Letras y obtuvo el grado de doctora en filosofía.
Adelina Zendejas ejerció la docencia como profesora alternando con colaboraciones en varios periódicos del país, como El Universal, El Gráfico, El Nacional, El Universal y Excélsior.
En 1956 fundó las revistas Magisterio y La Maestra como una extensión de su vocación educativa. En 1976, creó la columna “Ellas y la vida”, en el periódico El Día. En la que, bajo el seudónimo “Yolia”, escribió sobre la condición social de las mujeres y la inequidad de género .
También fue directora de la Escuela Taller para Obreras y Empleadas de extensión universitaria y delegada a la Primera Conferencia Mundial de Trabajadoras celebrada en Budapest en 1956.
Se considera que Adelina Zendejas fue una de las mujeres pioneras en una profesión tradicionalmente ocupada por varones. Su producción periodística fue muy prolífica y, ante las condiciones sociales de su época, tuvo que hacer uso de aproximadamente diez seudónimos femeninos.
Asimismo, difundió sus ideas sobre la educación demandando justicia, apoyando distintas causas.
Adelina fue delegada en la Primera Conferencia Mundial de Trabajadores, coordinó a varias instituciones con motivo del Año Internacional de la Mujer en 1975 y fue fundadora del Frente Único Pro-Derechos de la Mujer.
Adelina Zendejas falleció el 4 de marzo de 1993 a los 84 años de edad en la Ciudad de México.