Las lenguas evolucionan, el español que hablamos hoy en día es el resultado de años de cambios que se han efectuado a lo largo de su historia: las migraciones, la globalización, la economía del lenguaje, la sociedad, todos son factores que afectan al español y a todos los idiomas, pues aunque muchos nos esforcemos porque se hable o se escriba siempre igual, el lenguaje está viva y como tal, cambia. Todos los días son los hablantes los que la construyen, a pesar de sus reglas. estos cambios son tan importantes que pueden llevarnos a hablar algo totalmente distinto en el futuro. Como ocurrió con el latín, lengua “madre” del español, del francés, portugués, rumano, catalán, galés… fueron los propios hablantes los que “deformaron” el latín hasta que se convirtió en algo totalmente distinto. Esto no es algo malo, es un proceso normal, aunque a algunos nos cueste trabajo aceptarlo. Simplemente demuestra que nuestro querido español se encuentra vivo, cambia, evoluciona y crece.