Esta expresión es muy común y la utilizamos para darnos ánimo, cuando tratamos de superar algún reto, para volver a intentarlo, porque “la tercera es la vencida” y quizá ese siguiente intento si podremos lograr la victoria.
Esta es una de esas expresiones con muchas hipótesis de origen, pues es tan común que varias explicaciones la rodean. Una de ellas dice que en los siglos XVI y XVII, las leyes dictaban que a la tercera vez de cometerse un robo, el infractor perdía la vida. Otra teoría proviene de la organización del ejército romano, donde la primera línea de defensa estaba conformada por soldados poco experimentados, la segunda por personas con un poco más de experiencia y, finalmente, la tercera, por veteranos y expertos. Y una última teoría viene de las reglas de la lucha greco-romana, en donde la tercer caída de un mismo participante marca el final de la competencia. ¿Tú cuál crees que sea más acertada?