La tarea nunca había sido tan importante como lo es ahora, específicamente debido a que son las únicas evidencias que tenemos del progreso de nuestros alumnos, así como de las dificultades y retos que enfrentan mientras seguimos con clases a distancia o aún en un sistema híbrido. Pero en estas mismas circunstancias tampoco es sencillo lograr que los alumnos se comprometan a realizar sus tareas con la constancia que esperaríamos para darle la continuidad que quisiéramos a su proceso de aprendizaje.
¿Cómo asegurarnos de que harán la tarea o cómo podemos ayudarles a que la realización de tarea sea más fácil?
Es importante que los alumnos sean personajes activos en su proceso de aprendizaje y esto no solamente significa que participen en clase o realicen sus tareas, sino que se involucren en cosas como las fechas en las que entregan, los formatos o los tipos de ejercicios que realizan. Por ello, incluirlos al momento de acordar cuándo entregarán sus tareas los motivará a entregarlas, porque el compromiso será de ambas partes, tanto tuya por haberlos escuchado, como de ellos por haber sido participantes en las decisiones que los involucran.
No se trata de dejar que entreguen sus tareas cuando ellos quieran, sino de negociar en conjunto las condiciones de entrega, así podrían ellos hablarte de entregas importantes en otras materias, quizá de eventos importantes personales o de sus dinámicas para trabajos en equipo. Escúchalos y toma en cuenta sus necesidades, el compromiso aumentará y seguramente tendrás más tareas que revisar.
Como se dice en el punto anterior, la sensación de agencia sobre sus procesos es esencial, por ello es necesario que formen parte de las decisiones que se toman en la clase sean con base en sus necesidades. Esto implica que se les deje participar en el cómo, cuándo y por qué de sus tareas. Es importante que sepan cuál es el objetivo de sus tareas, cómo se relacionan con los temas que están viendo, así cómo la posibilidad de que colaboren con sus ideas, propuestas y habilidades. Si es posible, diversifica los formatos o soportes con los que entregan sus trabajos, abre la oportunidad de que demuestren sus capacidades de expresión, como en el dibujo, escritura u oralidad.
Esta parte es quizá de las más difíciles, porque no siempre tenemos padres participativos o familias con la posibilidad de estar atentos a los movimientos de sus hijos, pero si piensas en tareas que puedan involucrarlos de formas sencillas probablemente tendrás su atención, la cual poco a poco aumentará cuando vean los efectos que estos tienen sobre los pequeños. ¿Qué tipo de tareas sirven para esto? Entrevistas a familiares para obtener algún tipo de información, apoyo logístico para resolver tareas sencillas, como pedirles a los papás que recorten algún material, es importante que no sean tareas muy tardadas o complejas, sino que el tiempo sea corto y no muy difíciles.
Entre mejor sea tu comunicación con los padres, mejores serán los resultados. A veces los padres no ven la importancia de sus acciones en estos temas, pero si tú les hablas de las razones para pedirles esto, el enfoque será distinto.
Puede ser que si ves poca participación comiences a dejar más tareas para aumentar la posibilidad de que practiquen o si ves que el rendimiento ha bajado busques ayudarlos a repasar más, pero es importante que los trabajos que dejas sean más significativos que numerosos. Elige muy bien las batallas que librarán los alumnos, porque un volumen grande de tareas o ejercicios los hará declinar. Si les falla alguna tarea y estas se acumulan rápidamente sentirán que ya no vale la pena hacer el esfuerzo, si se abruman con el tamaño de pendientes será más fácil que lo dejen pasar, mientras que tareas muy puntuales tendrán mejores resultados.
En este mismo sentido, es importante que todas las tareas y trabajos tengan realmente una relación directa con lo que ven en clase, procura hablarles de cómo se relacionan sus esfuerzos con el futuro de la clase, así como con aspectos prácticos del mundo a su alrededor, la pertinencia de las tareas es lo que más motiva a los estudiantes a realizarlas, no dejes que tus tareas sean solamente un pendiente más en la vida de tus alumnos.
En estos últimos meses la dificultad para aumentar la participación de tus alumnos es mayor. ¿Cuáles han sido tus estrategias para lograr mayor compromiso? ¡Comparte con nosotros!