Jubilarnos es una de las metas de todo trabajador, llegar a esa etapa dorada en la que tenemos tiempo para hacer todo aquello para lo que no teníamos tiempo mientras nos dedicábamos al trabajo.
Sin embargo, esa época soñada a veces se convierte en una etapa difícil, pues acostumbrados a trabajar, a tener un horario muy bien estructurado y a convivir con mucha gente a diario, tener todo el tiempo del mundo llega a abrumarnos.
Pero no te preocupes, existen muchas opciones para que todo ese tiempo que tienes tras la jubilación sea aprovechado, simplemente se trata de que te decidas. ¿Qué hacer? ¡Aquí te damos algunas opciones!
Hoy en día existen muchas opciones que se ajustan a cualquier presupuesto. Conocer nuevos lugares y personas es una de las actividades más satisfactorias. Saca el mapa y decídete por algún destino, puedes viajar tú solo o en grupo, conoce lugares, personas y culturas diversas. Arriésgate, este es un buen momento para experimentar cosas nuevas.
Ya sea porque te preocupa tu economía, porque quieres probar algo nuevo o porque simplemente no quieres dejar de ser productivo, pdrías dedicar una parte de tu día en trabajar. ¿En qué? Existen muchos estudiantes que constantemente requiere clases particulares o incluso maestros en formación que les gustaría recibir asesorías, tus años de experiencia pueden servirte para ayudar a esos estudiantes.
Aunque si lo que quieres es dejar la docencia en paz, puedes probar nuevos rumbos, en la actualidad hay muchas opciones, incluso de medio tiempo, que te ayudarán a estar activo y a recuperar una rutina que te haga sentir tranquilo.
Hacer mejoras en el hogar es una tarea que implica creatividad, organización y concentración. Seguramente, a lo largo de los años, ideaste mil formas de mejorar tu casa, planes que nunca realizaste por falta de tiempo.
¡Hoy es el día! Tu puedes ser tu propio diseñador de interiores, investiga sobre materiales y sus costos.
¿No te convece? Este momento también podría ser para cambiar de casa, quizá a un lugar más pequeño en el que puedas ahorrar, tanto dinero como tiempo.
Integrarte a un voluntariado o incluso organizar tu propia causa es una forma de ayudar a otros. Estas actividades dan un sentimiento de servicio al prójimo y de alegría, así que no solo se trata de los otros, también de ti.
Selecciona alguna causa con la que sientas una conexión especial y empieza a colaborar.
Aunque te parezca algo extraño, esta etapa podría llevarte muy lejos, depende de las metas que te plantees. ¿Alguna vez quisiste estudiar algo, pero la vida te llevó por otro camino? Decídete ahora, estudia aquello que siempre quisiste o busca nuevos horizontes, recuerda que los límites sólo los pones tú. ¡Anímate!
Seguramente durante tu tiempo de docente pasaste muchos años lleno de lecturas que hacías con o para tus alumnos, ahora tienes el tiempo de leer lo que tu quieras.
Recuerda que la lectura te llevará a lugares extraordinarios. Puedes inscribirte a un club de lectura o incluso crear uno con tus amigos y familia, esto hará que la lectura sea una actividad de grupo y te unirá a otras personas.
Tras los años de experiencia, seguramente tienes muchas cosas que contar, comparte con los otros y contigo mismo esa historia de vida o abre tu imaginación. Puedes tomar talleres de escritura u organizar tu tiempo para dedicar algunas horas a la escritura.
No necesariamente tiene que ser un libro, puedes abrir un blog. Te aseguramos que la interacción con otras personas a través de la red puede ser muy divertida y enriquecedora.
¿Ya no sabes qué hacer o estás muy lleno de planes? ¡Cuéntanos tus experiencias y dinos si has hecho algo de la lista!