El papel del docente ha tenido muchos momentos a lo largo de la historia de la humanidad. En general siempre se ha reconocido a los maestros como parte fundamental de la sociedad y se ha reconocido su trabajo, sin embargo, por diversos cambios sociales, el tratamiento que se hace a los docentes ha cambiado también a lo largo del tiempo.
Lo cierto es que al aumentar el reconocimiento al docente se benefician los estudiantes y también la sociedad en la que viven, pues esto anima y enaltece el esfuerzo que hacen los maestros día a día, pero también hace que los alumnos reconozcan con respeto lo que significa ser maestro, así como lo padres de familia, que comienzan a ver en ellos una figura que no trata de competir u oponerse a sus hijos, sino ayudarlos a desarrollarse.
Se ha dicho mucho que la pandemia ayudará a que los padres, estudiantes y la sociedad en general reconozcan con mayor entusiasmo la importancia de la docencia. Y es que al menos en esta temporada la educación es uno de los sectores que más se ha visto afectado por el desarrollo del Covid, pues millones de alumnos alrededor del mundo abandonaron los salones de clase, muchos de ellos se convirtieron a la educación a distancia de un día para otro y muchos otros entraron a contextos muy hostiles de los que normalmente salen solo gracias a la escuela.
Esto sin duda ha sido un reto para los docentes, quienes enfrentan también adaptaciones, estrés y estar en casa con sus propios hijos y familias en un estado de tensión constante. Quizá debido a eso, muchos sectores de la sociedad han volteado a ver de nuevo la importancia que tienen los docentes en el día a día, cuando hay padres que intentan enseñar a sus hijos desde casa o se dan cuenta de lo mucho que los pequeños extrañan a sus profesores.
En un contexto tan extraño como el que estamos viviendo ahora mismo, cosas tan básicas como la medicina y la educación se observan de forma distinta. Muchas cosas cambiarán a partir de ahora, muchos contextos escolares tendrán que modificar su forma de ver y hacer las cosas e incluso nosotros como docentes tendremos que encontrar la forma en que hacemos las cosas, pero el inicio para un cambio también tiene que ir de la mano de la sociedad en la que estamos.
No hay mejor motivación para un docente que el reconocimiento social un contexto en el que los padres, las autoridades y en general las personas sepan que sus maestros son parte fundamental de la vida diaria, en la que se observe el esfuerzo que estos maestros hacen día a día ayudará a que cualquier profesor comience a abordar de forma distinta sus clases, pues será evidente la importancia de su trabajo para el presente y el futuro de sus alumnos.
Por esto y más reconocer la labor de los docentes todos los días, no solo en el Día del Maestro, es fundamental.