El trabajo en equipo es una habilidad muy importante que seguramente muchos de nosotros tratamos de inculcar en los mas jóvenes, quienes no siempre se sienten cómodos con estas experiencias, pues las actividades en grupo llegan a despertar dificultades sociales y de organización. A pesar de ello, y sin importar las buenas o malas experiencias, trabajar en equipo es esencial en el futuro de nuestros estudiantes y para el día a día en la escuela.
Esto no siempre es fácil, porque las relaciones interpersonales son muy complejas, somos humanos y a todos, en ocasiones, se nos complica la relación con los otros. Sin embargo es importante prestar atención a esto, ya que construir relaciones positivas es necesario, tanto para los alumnos, como para que nuestro ambiente de trabajo sea el más óptimo y realmente podamos ofrecer la mejor parte de nosotros.
¿Cómo trabajar en equipo al interior de la escuela?
Si los propios docentes, directivos y personal administrativo tienen una buena comunicación entre los miembros del equipo, será más fácil reconocer las dificultades, así como las soluciones para los diversos problemas que se presentan a diario, tanto en el aula, como en la escuela en general. Esto no es solamente una cuestión de ser buenos compañeros sino de construir un equipo de trabajo que crezca en conjunto y aporte experiencias, soluciones, retos e ideas para todos los miembros del equipo, tanto profesores, como alumnos.
La base de un gran equipo no está solamente en la división del trabajo, sino en la relación que mantengamos con los demás, pues esto determina si podemos lograr una comunicación efectiva, así como el grado de confianza que tenemos en nuestros compañeros.
La inteligencia emocional implica nuestra capacidad de reconocer nuestras emociones y trabajar con ellas de forma sana. El primer paso es fortalecer esta parte en nosotros mismos, pero también en la conciencia del equipo, que todos los miembros puedan percibir cómo se sienten dentro de las reuniones y cómo afecta esto su desarrollo interpersonal.
Para lograr que un equipo se mueva con inteligencia es necesario que todos entiendan sus diferencias, pero no las utilicen para confrontarse, sino para comunicarse. Diferentes perspectivas harán un ambiente mucho más rico y fértil, en donde los proyectos tomarán en cuenta ópticas distintas. A pesar de ello, en ocasiones las diferencias son fuente de discrepancias y hasta peleas.
Establecer un ambiente de trabajo que considere estas diferencias y que permita compartir nuevas perspectivas, sin imposiciones ni prejuicios es una forma de aprovechar la diversidad. Establecer reglas generales para todos, respeto y buena disposición son principios elementales.
Y es que la diferencia ayuda a la diversidad. Por ello es útil para la innovación. Lo cual permitirá que todos juntos puedan avanzar y cooperar hacia un objetivo en común. Conversar y participar en conjunto para todos los alumnos es un buen comienzo, esto no significa que todos necesiten caminar hacia objetivos comunes, pues cada grupo tendrá sus propias necesidades, pero sí establecer colaboración entre docentes, directivos e incluso administrativos ayudará a que los alumnos sientan que forman parte de una comunidad y a sentirse seguros.
Trabajar en equipo no siempre significa tener metas conjuntas que se establezcan para todos los alumnos, sino prestar conocimientos e ideas para mejorar la experiencia en todos los salones.
¿Cómo trabajan en equipo en tu escuela? ¿Qué consejos le darías a alguien que busca convertir su grupo en un gran equipo?