Se acercan las fiestas navideñas, una época de celebración y sobretodo de fraternidad y buenos deseos. Más allá de las creencias, esta temporada sirve para unir a las personas. Cada comunidad e incluso cada familia tiene sus propias tradiciones, tan diversas como las propias personas.
¿Has tenido en tu salón de clase algún pequeño cuyas tradiciones sean distintas a las de la mayor parte de la comunidad? Conocerlos mejor, platicar con ellos sobre las diferencias culturales es muy enriquecedor, tanto para los alumnos como para los docentes.
¿Conoces algunas de estas tradiciones de nuestro país y de otros lugares del mundo? ¿Cómo celebras tú estas fechas?
Michoacán es un estado lleno de tradiciones, muy conocido por las celebraciones de sus poblados para Día de Muertos, lo que le ha dado renombre no solo en México, sino en el mundo. Pero en este bello estado el sincretismo de la conquista española y los pueblos indígenas está muy presente, por lo que en todas las fiestas hay características muy particulares que no pasan desapercibidas.
En Navidad varios poblados destacan por la importante presencia purépecha y de sus tradiciones, las cuales conviven con las creencias católicas.
La Fiesta Takari es particularmente célebre. Esta es originaria de Tarímbaro y se trata de una recolección de heno para preparar el pesebre del niño Jesús, esto se hace mientras se lleva a cabo una tradicional danza de orígen prehispánico. En el estado también son importantes las figuras de cera y madera con las que se crean los nacimientos, con motivos tradicionales, como los pescadores con sus características redes de mariposa.
El estado de Oaxaca es particularmente rico y diverso, los diferentes grupos prehispánicos de la región hacen muy variadas sus tradiciones, algunas reconocidas internacionalmente como La Guelaguetza. Sin embargo, en diciembre la capital del estado se distingue por una fiesta muy curiosa: La noche de los rábanos.
El 23 de diciembre el centro de la ciudad celebra un concurso de esculturas hechas principalmente con rábanos, adornados con hojas de col, flores y otros vegetales, en donde el rábano es siempre el protagonista de ingeniosas figuras y escenarios realizados por horticultores y floristas.
Se dice que a finales del Siglo XIX, la noche previa a la Noche Buena era tradición que llegara un mercado a la ciudad, en donde los vendedores comenzaron a crear figuras cada vez más elaboradas con los rábanos con tal de atraer a los compradores. Esto dio pie al tracional concurso que todavía se celebra.
Quizá una de las tradiciones más conocidas de nuestro país son las posadas, celebradas a partir del 16 de diciembre, reúnen a familiares, amigos y vecinos para tomar ponche, entregar aguinaldos y partir las tradicionales piñatas en forma de estrella, así como cantar los versos tradicionales, para justamente pedir posada, con lo que se escenifica la noche que pasaron San José y la Virgen María al buscar asilo para el nacimiento de su hijo. Se acostumbra que estas posadas sean organizadas entre vecinos o familiares y a partir del 16 de diciembre diferentes casas reciben a “los peregrinos”.
Una variante similar a estas posadas está en la tradición de La Rama, la cual ha sido celebrada en los estados de la costa del Atlántico durante décadas, pero que actualmente está mucho más viva en el estado de Veracruz.
Esta tradición consiste en adornar la rama de un árbol con luces y distintos motivos navideños, lo bastante grande como para hacerla notoria, pero que pueda ser cargada por una sola persona.
Las personas llevan esta rama por las calles mientras cantan una canción con la que se pide un aguinaldo en cada casa. En Veracruz la rama es acompañada por jaranas, arpas y guitarras y suele llevarse a cabo entre navidad y el fin de año, mientras que en Yucatán se hace en los mismos días de las posadas, a partir del 16 de diciembre.
¿Cómo celebran estas fiestas en tu comunidad? ¡Comparte con nosotros estas tradiciones!