Los profesores se enfrentan a mucho estrés en su vida diaria, esto podría afectar seriamente su salud, tanto física como emocional. Los alumnos que representan un reto, las presiones laborales y la sobre carga de trabajo, sumado a la presión social que existe hacia la figura de los maestros, resultan en problemas serios de salud, por eso es importante que aprendamos a cuidar de nosotros mismos, pues para ser el mejor maestro, el mejor padre, el mejor hermano o el mejor hijo, primero debemos estar bien con nosotros mismos. Aquí te van algunos consejos para mantener el equilibrio:
Haz ejercicio
Esta parece ser la solución de todos los médicos para casi todas las enfermedades y a veces resulta un consejo algo chocante, pues existe poco tiempo para realizarlo. Sin embargo es realmente algo que te ayudará a mejorar tu vida, unos minutos al día para hacer ejercicio le darán claridad a tu mente, fuerza a tu cuerpo, disciplina a tus días y un respiro a tu ajetreado ritmo. No se trata de convertirte en atleta profesional, pero sí de darle energía al cuerpo.
Toma aire
Darte unos momentos al día para respirar y descansar la mente también es importante, esta es una práctica que parece pequeña, pero requiere cierta disciplina. Todos los días date algunos minutos para controlar tu respiración, llevar un ritmo y despejar tu mente de todos los asuntos pendientes. Esto te dará una perspectiva diferente de las cosas y le dará a tu cerebro un descanso.
Conéctate con la naturaleza
La mancha urbana que poco a poco se come el territorio a veces hace la vida un poco deprimente y caótica, buscar de vez en cuando un espacio para caminar por algún parque cercano, la playa o algún río refrescará todo tu mundo. No es necesario salir de fiesta ni llevar a cabo actividades específicas, solo caminar y sentir el aire fresco en tus pulmones será de ayuda para ti.
Cultiva la empatía
El estrés provoca irritabilidad, nos pone a la defensiva y puede orillarnos a discutir o pelear constantemente. Piensa siempre que tus alumnos, tu familia, tus compañeros de trabajo, son seres humanos que pasan por situaciones igual de difíciles que tú, viven problemas tan difíciles como los tuyos, tienen días malos o no han comido bien. Ser empático es comprender lo que otros pueden sentir, pruébalo, esto te ayudará a no perder los estribos y sentirte bien contigo mismo.
Pinta, canta, baila…
Tener algún pasatiempo te ayudará a descansar y ampliará tus horizontes, piensa en esas cosas que te gusta hacer y hazlo, si te gusta dibujar o pintar, hazlo de vez en cuando, si te gusta cantar o bailar toma clases. No se trata de que te conviertas en pintor o bailarín, se trata de concentrarte un rato en algo que te disfrutes, ayudar a tu cerebro con nuevas habilidades y disfrutar de tu tiempo libre. No todo es ver televisión, busca otras actividades, esto te dará más energía, alimentará tu mente y tendrás una nueva perspectiva de las cosas.
¿Tienes alguna estrategia en tu vida diaria para relajarte? ¿Tú cómo haces para mantener el equilibrio? ¡Cuéntanos!