La pandemia ha traído nuevos retos para todos, el ámbito de la educación es quizá uno de los que más transformaciones ha tenido en el último año y sin duda ha puesto en marcha toda la creatividad e innovación de la que somos capaces, lo cual no disminuye las dificultades. Una de las grandes preocupaciones durante las sesiones a distancia es el uso de la cámara y los micrófonos, tenemos alumnos que nos interrumpen constantemente, incluso si se trata solo de ruidos ambientales, mientras que tenemos alumnos que aparecen en la sesión solo con un nombre (a veces ni siquiera su propio nombre) y no hablan ni aparecen a cámara durante toda la clase, con lo que no logramos saber si estuvieron presentes o solo dejaron la sesión en el fondo de su casa.

¿Has intentado animarlos para encender su cámara o incluso tienes una política de cámara obligatoria? Aquí te damos algunas ideas para animarlos a mantener sus cámaras abiertas y participativos en el aula virtual.

¡Sin obligaciones!

Antes que nada es importante saber que una política de cámaras encendidas puede resultar contraproducente para la participación en clase. Aunque sabemos que resulta muy complejo llevar la clase sin saber si tienes o no alumnos escuchándote, obligar a tus estudiantes a mostrarse a cuadro puede provocarles ansiedad y estrés innecesario, con lo que se generará cierta aversión a la clase y probablemente estarán más concentrados en las implicaciones de encender su cámara que en la clase.

Tanto el ambiente en el que se encuentra, como una conexión inestable pueden hacer complicado el hecho de mantener la cámara prendida, piensa que algunos alumnos no se sienten cómodos por el fondo que proyecta su cámara, algunos estarán demasiado conscientes de sí mismos al verse a cuadro, otros tendrán miedo de las opiniones de sus compañeros y otras más experimentarán dificultades para escuchar la clase de forma fluida al encender la cámara. Así que en términos generales es mucho mejor mantener la cámara como una opción más que como una obligación.

Claro que, a su vez, esto presenta otras dificultades para la clase, pues necesitamos saber que ellos están ahí y la participación es muy importante. Pero quizá llegar a un momento donde todos tengan la cámara encendida requiere otras acciones previas.

Construir comunidad

La más importante es saber que ningún estudiante será acosado o molestado por lo que pueda verse a cuadro y aunque no podemos garantizar que no ocurrirán accidentes curiosos que se volverán una broma (alguna mascota, la aparición de un hermano más pequeño, o cualquier anécdota similar), si podemos lograr una comunidad que garantice respeto o que podemos abordar estas problemáticas de forma segura. Esto se logrará si tus alumnos sienten que pertenecen a un grupo, donde todos son importantes y donde todos son escuchados. ¿Cómo lograrlo? Es necesario tomarlos en cuenta para la toma de decisiones, crear actividades donde todos participen, escucharlos o permitir que se expresen y encuentren puntos en común para compartir con todos sus compañeros, también es importante dejar claro que cualquier falta de respeto será censurada y para esto es necesario sembrar empatía.

Procura la participación en otros formatos

Aunque lo mejor es tener estudiantes activos en vivo, siempre podemos impulsar otro tipo de participación con la que se sientan más seguros, crear encuestas o pequeños cuestionarios que puedan resolver durante la clase te ayudará a saber que siguen ahí, mientras que a ellos les dará algo que hacer, también puedes pedirles que participen en el chat de la sala o que participen de forma verbal. Si ellos saben que tienen otros medios para hacerte saber que están atentos es posible que se sientan más cómodos durante la clase.

Habla directamente con ellos

Si tienes estudiantes demasiado reticentes a la participación con cámara abierta, puedes acercarte directamente a ellos y conversar sobre las razones detrás de esto. Es importante que los hagas sentir seguros, para que puedas comprender cuáles son sus verdaderas razones, muestrate empático, así podrán construir opciones juntos, podrías lograr participaciones breves o darle la oportunidad de compartirte material en video que solo veas tú como docente, o ayudarlos a crear alguna exposición periódica, poco a poco, mostrarse en vídeo podría ayudarlos a sentirse más confiados al momento de la clase.

Pon sobre la mesa tus razones

También es importante que expongas tus razones, muchos estudiantes se sienten obligados porque los adultos a su alrededor opinan sobre lo que deberían hacer durante sus clases sin exponer las razones detrás de ellos, muchos de ellos podrían creer que es totalmente innecesario, por lo que también es importante exponer cuál es la razón por la que se les pide esto, no utilices un argumento de autoridad para obligarlos.

¿Has tenido menos participación debido a las camaras apagadas? ¿Cómo has animado a tus alumnos a mostrarse en clase? ¡Comparte tus ideas con nosotros!