Cuando recibiste tu lista de alumnos no venía Cupido entre ellos, pero, conforme ha transcurrido el ciclo, cada día notas más su presencia, el amor ya flota en el ambiente. ¿Qué hacer? Aquí van algunas sugerencias, ya que el tema llega a ser como una flor con espinas.

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• 1) Antes que nada, no menosprecies esta clase de relaciones, quizá tú aún recuerdas el nombre de tu primer amor, ponte un poco en sus zapatos, porque tú alguna vez tuviste esa edad y sufriste el terrible mal de las mariposas en la panza.
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• 2) Si tu alumno o alumna se acercan a pedir tu opinión, aunque lo pienses, evita usar frases como: “estás muy joven, deberías pensar en estudiar y no en tener novios”; “¿ya saben tus papás?”, “aprende a lavar primero tu ropita y luego hablas de noviazgo”; “¡Tú qué vas a saber de amor!”.
• Si usas estas frases romperás la confianza de tus alumnos, se cerrará el canal de comunicación y perderás la oportunidad de orientarlos.
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• 3) Si tu alumno(a) te pregunta cómo acercarse a un chico o chica, no des información que no te solicita, por ejemplo: -Profe, ¿cómo le diría a alguien que le gusta?, es una pregunta inocente y legítima, entonces no les hables de métodos anticonceptivos puesto que das información de más y delicada que requiere de otro tipo de orientación y tampoco es lo que quería saber.
  
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• 4) Si interceptas mensajes en los clásicos papelitos de carácter afectivo, evita exhibirlos frente al resto de la clase, además de ser vergonzoso, es un tema íntimo que no debe ventilarse, es mejor esperar al final de la clase y hablar con la nueva pareja en privado para abordar este tema con una cabeza más fría, ya sea para orientarlos o, si no quieres meterte en ese tema, sólo pídeles que eviten hacerlo dentro de tu clase, ya que afecta la atención del resto de los compañeros.
  
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• 5) Si ya empieza a ser un tema recurrente entre tus alumnos, acércate al profesor(a) especialista en el tema para abordar el asunto apegados a lo que la SEP autoriza en temas de: desarrollo sexual, métodos de control y prevención de enfermedades.
  
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• 6) Debes estar al pendiente de las zonas “oscuritas” de tu escuela, recuerda que siguen siendo menores y su bienestar sigue siendo parte de tu responsabilidad, no querrás tener padres iracundos que te acusen de negligente porque hayan subido de tono y pasen de una “tomada de mano” a una “pedida de mano”.
  
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• 7) Si hay alguna pareja que se entusiasma demasiado, antes de acusarlos con sus padres, habla con las autoridades de la escuela e intenten llegar a acuerdos con sus alumnos, pero si la conducta se repite, cita a sus padres y en compañía de un psicólogo o trabajador social, traten de orientarlos para que la situación se lleve de la mejor forma posible. Siempre con respeto, no olvides que sus sentimientos también son válidos.
  
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• Si te parece un tema complicado o preocupante, esperamos que estos tips te ayuden. Seguramente te has enfrentado a esta situación muchas veces. ¡Cuéntanos tú que haces cuando llega Cupido a tu escuela!