El acoso en las escuelas ha sido siempre un tema de gran importancia para docentes y padres de familia, hemos visto cómo este tema se superpone como una necesidad para ser atendida y, especialmente, prevenida. Este inicio de ciclo escolar no tendremos la oportunidad de ser testigos de la socialización entre alumnos, ni de monitorear en algún sentido la evolución de sus relaciones de forma presencial.
Sin embargo, y es muy importante que lo tomemos en cuenta, las relaciones continúan y se establecerán a pesar de la distancia, especialmente si existen herramientas como foros o redes sociales donde los alumnos se puedan comunicar con nosotros o entre ellos. De hecho es algo bueno y necesario que nosotros pongamos mucha atención en este sentido, pues en el ciberespacio la dinámica de las relaciones tiene sus propias características.
Como su nombre lo indica es el tipo de acoso que se da entre compañeros, pero que se observa en espacios digitales, como las redes sociales, las aplicaciones de mensajería o los foros. Puede parecer que esto es menos agresivo que el acoso que se da de forma física en un espacio, sin embargo es tan nocivo y peligroso como cualquier otro tipo de acoso o agresión.
La exposición pública, el aislamiento social pueden traer las mismas y difíciles consecuencias en un ambiente presencial como en uno a distancia, esto se suma al hecho de que una publicación en internet puede llegar a miles de personas en muy poco tiempo y permanecer en el ciberespacio prácticamente de forma permanente. Así que en este aspecto la prevención es uno de los temas más importantes.
¿Qué podemos hacer los docentes que claramente no tenemos acceso a sus espacios privados? Desde nuestra trinchera vale la pena trabajar sobre el sentimiento de comunidad en nuestros alumnos, hacerles ver que a pesar de la distancia son compañeros, pertenecen a un mismo espacio y que sus acciones pueden dañar ese tejido social que conforman juntos. Entre más fuerte sea ese lazo más difícil será que algunas acciones trasciendan.
Es muy importante que esto esté basado en la empatía y en el respeto a la diversidad. Hablen abiertamente sobre sus diferencias, así como de las cosas que tienen en común. Algunas actividades para romper el hielo y juegos extracurriculares pueden fortalecer este lazo.
En este aspecto, como en todos los demás, la participación de los padres es esencial. Habla con ellos de este tema, escucha con atención sus observaciones acerca de los comportamientos digitales que tienen en casa y procura no juzgar sus hábitos, cada ámbito es distinto y tienen necesidades diferentes.
Habla con los alumnos
El mundo digital hace muy relativos algunos comportamientos que de forma presencial serían más fáciles de discernir para algunas personas, pues no aparentan tener las mismas consecuencias o medirse de la misma forma, por ello es muy importante crear conciencia entre nuestros alumnos de forma empática sobre sus acciones. Habla con ellos sobre su conducta en redes sociales, abre la discusión y déjales claro qué acciones pueden ser dañinas para los otros. Abre el debate en tu salón de clases, aunque este sea virtual.
Entre los nuevos conceptos vale la pena discutir con ellos el de ciudadanía digital, que justamente pone sobre la mesa los derechos y responsabilidades que adquirimos como usuarios y miembros de una comunidad, Google tiene algunos recursos divertidos que podrían servir a tus alumnos para re-pensar sus comportamientos y lo que asumen sobre sus compañeros.
Varios estudios han determinado que el factor más importante en el tema de prevención del bullying no son ni las víctimas, ni los agresores, sino los testigos. Se trata de los alumnos que están presentes y que por desconocimiento, por temor o por inseguridad no se atreven a actuar, ni a favor ni en contra. Si hablamos con ellos sobre el tema abiertamente, les damos herramientas para discernir cuándo algo está bien o debe ser detenido, serán ellos mismos quienes regulen el equilibrio en el patio de recreo o en este caso en las redes sociales, ellos sabrán cuándo actuar. También necesitamos darles herramientas para actuar, es decir, opciones sobre qué hacer y cómo apoyar a sus compañeros. Todo esto reduce la sensación de pasividad, en cambio los hace agentes del cambio.
¿Cómo has abordado el tema de bullying entre los estudiantes? ¿Qué puedes hacer por ellos en este momento de incertidumbre? ¡Comparte con nosotros!