En nuestras escuelas acostumbramos celebrar este día a los más pequeños, quizá con algún convivio, unos dulces o algún pequeño detalle que haga especial el 30 de abril, pero ¿de dónde viene esta celebración y por qué es tan importante?
Durante el siglo XX el mundo fue testigo de dos guerras sin precedentes, que cambiaron completamente la dimensión de los conflictos bélicos y cuyos alcances sorprendieron a todos los países del mundo. Sus consecuencias se pueden sentir incluso hasta nuestros días. Tras la Primer Guerra Mundial, fue bastante obvio que los más afectados eran los niños, quienes se convirtieron en víctimas inevitables de problemas de adultos.
Por ello, al terminar esta guerra Eglantyne Jebb, fundadora de la organización Save the Children, junto con el Comité Internacional de la Cruz Roja, impulsaron la primera adopción de la Declaración de los Derechos de los Niños.
Más tarde y con la experiencia del Holocausto y la Segunda Guerra Mundial, la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en una asamblea en 1959, aprobó la Declaración de los Derechos del Niño y lanzó la propuesta de que todos los países del mundo establecieran un día para celebrar a los niños y promover su bienestar. La ONU fijó el 20 de noviembre como el Día Universal del Niño.
Finalmente, en 1989, se estableció la Convención sobre los Derechos del Niño, que desde entonces busca promover los derechos de los más pequeños y fomentar tanto “la fraternidad y la comprensión entre los niños del mundo entero”, como su bienestar social.
Lo anterior tiene que ver con garantizar que los niños tengan acceso a una vivienda digna, a servicios dignos de salud y a una educación digna que los prepare para la vida, para que, cuando sean adultos, puedan proveerse ellos y a su familias de un bienestar integral.
En nuestro país, fue el Presidente Álvaro Obregón quien instituyó, desde 1924, el 30 de abril como el Día del Niño, fecha en la que se firmó la primera Declaración de los Derechos de los Niños, en Ginebra, un momento histórico que sentó un precedente en todo el mundo, pues por primera vez se reconocieron los derechos de los más jóvenes y la responsabilidad que los adultos tienen hacia ellos.
Por esto se celebra el Día del Niño en todo el mundo, es una fecha para celebrar pero también para hacer a los niños partícipes y conocedores de sus derechos.
¿Cómo lo celebran en tu escuela?