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El momento en el que escogemos nuestra profesión es uno de los pasos más importantes en la vida de cualquier persona. Ese momento puede ser muy complicado, pues la inexperiencia y las dudas nos hacen dudar de cómo tomar la decisión correcta.
Por eso, quienes están en esa encrucijada y se preguntan si la docencia es realmente su mejor opción. ¿Qué motiva a alguien a convertirse en docente? ¿Existen realmente ventajas en esta profesión? ¿Cuáles son los requisitos para hacerlo?
En este texto te contamos algunos de las motivaciones y requisitos para convertirte en docente, para que te informes mejor, con más seguridad.
Existen muchas personas que se convirtieron en docentes aunque no habían pensado en esa opción antes, pero que su carrera y el camino profesional que siguieron los llevó a eso. También existen aquellos que desde la primera vez que consideraron su carrera supieron que lo suyo era estar en las aulas, mucho otros lo descubrieron más tarde. ¿Qué influencia tiene la vocación en este trabajo?
La vocación no significa que para convertirse en docente se requiere haberlo deseado eso desde el inicio, pero es verdad que esta carrera requiere un alto sentido de responsabilidad, creatividad y un gusto por ayudar a otros, ya que no se trata solo de dominar un tema o una materia. Impartir conocimiento va más allá de hablar durante algunas horas, dejar tareas y practicar exámenes, todos los alumnos son distintos, algunos tienen necesidades específicas y nosotros necesitamos innovar constantemente, adaptarnos al mundo conforme este cambia. Así que la vocación es un tema importante en esta carrera, pues no basta con saber, es necesario sentir deseo y gusto por todo lo que implica: la relación con los alumnos, con los padres de familia, el desarrollo de estrategias y herramientas para la clase, formar equipo con la comunidad docente, aprender constantemente, etc.
Un docente nunca deja de prepararse ni de aprender. En general, para ser un profesionista apto se requiere mantenerse en constante preparación, pero este es un requisito muy importante para cualquier docente, porque la educación se encuentra siempre en evolución, porque el mundo cambia constantemente y nuevos y amplios descubrimientos se hacen cada día en diferentes áreas que nos pueden dar más luz al respecto de nuestros conocimientos.
Aunque en ocasiones las limitaciones pueden ser frustrantes para algunos profesores, es verdad que estar al frente de un aula es una gran oportunidad de hacer una diferencia en el mundo, pues en nuestras aulas se encuentra el futuro. Motivarlos a aprender, a buscar el conocimiento, así como a pensar más allá de su contexto.
Al ser docente ningún día es igual a otro, ningún grupo es igual a otro y todos los días enfrentamos desafíos nuevos. Esta es una de las profesiones que ofrecen mayor diversidad de experiencias y posibilidades, además de una gran cantidad de temas que tendremos que aprender con el tiempo, conocer alumnos distintos, abordar problemas difíciles y pensar fuera de la caja para resolverlos. Esto implica un reto, pero también nos aleja de una rutina diaria.
A pesar de ese sentido de aventura, la docencia es también una profesión que ofrece estabilidad y oportunidades de crecimiento. Ya sea en escuelas públicas o privadas, las escuelas son siempre necesarias y si nosotros continuamos con nuestra formación, seremos profesionistas muy capaces que podrían toparse con nuevas oportunidades. Los periodos vacacionales sirven para convivir con la familia y el horario de trabajo siempre se adapta al de los más jóvenes del hogar, algo muy útil si piensas hacer crecer la familia en el futuro.
Estas ventajas de la profesión son algunos de los factores que puedes tener en cuenta, pero recuerdo que gran parte del trabajo está en el trato diario con los niños o jóvenes. Si tienes más dudas puedes unirte a la comunidad de Sala de Maestros en Facebook y escuchar lo que docentes de todo el país te pueden compartir.
¡Cuéntanos a ti qué te motiva a convertirte en docente! Comparte con nosotros.