La memoria es nuestra mejor aliada cuando tratamos de aprender algo, por lo que es muy importante mejorar nuestra capacidad de memorización cuando estamos en la escuela. Sin embargo, en ocasiones parece muy difícil memorizar o retener cierta información por más tiempo del que dura la clase. ¿Cómo podemos apoyar a nuestros alumnos para que su memoria no les falle?
Recordar es necesario para la vida escolar, pero también es verdad que nuestros cerebros están hechos para olvidar. Sí, el proceso de selección de información y posterior olvido es natural y necesario, pues así se deshace nuestro cerebro de información que no necesita y que bloquería de diversas formas su funcionamiento, por ello es muy importante que apostemos por un aprendizaje profundo y no solamente porque los alumnos recuerden información.
La verdad es que al momento en que nuestros estudiantes reciben información también están ya en el proceso de olvidarla, por lo que una exposición simple o una lectura no bastará para que ellos aprendan o retengan información. Aquí te damos algunas ideas para que le des un empujón a su memoria.
Aunque la información es fácilmente olvidable, cuando escuchamos historias involucramos nuestra atención en niveles muy diferentes que si solo escuchamos datos o si leemos información. Por ello el storytelling es una gran herramienta para el salón de clases, ya que un arco narrativo implicará a nuestros alumnos prestar atención de forma que pueden encontrar personajes para identificarse, sentir curiosidad por el desenlace y además ver en acción conceptos que de otra manera solo verían en el pizarrón u olvidarían a gran velocidad.
La comunicación no es solamente a través de lenguaje oral o escrito, nuestro cerebro recibe estímulos por medio de todos sus sentidos, por lo que agregar información a través de otros soportes ayudará a los alumnos a recordar mejor la información. Así que añade a tus clases imágenes, ilustraciones, videos, cuadros sinópticos y demás elementos que impliquen a tus alumnos el uso de otros sentidos, no solo el auditivo o la lectura. Si puedes agregar música, sensaciones e incluso aromas ayudarás a tus alumnos a recordar mucho más y mejor lo que les presentas.
Una clase experimental en la que los alumnos vean reflejado de forma vívida lo que los libros tratan de enseñarles también son importantes. Busca experimentos sencillos o proyectos más elaborados, tú decides qué tan compleja puede ser tu clase, pero dales la oportunidad a tus estudiantes de vivir el conocimiento de forma práctica, esto además ayudará a borrar la sensación de que lo visto en clase no se utiliza en la vida diaria.
A pesar de todas las metodologías e ideas innovadoras que introduzcamos en nuestro salón de clases siempre habrá información que los alumnos necesitan memorizar, así que a veces necesitaremos estrategias para hacer más simple esta tarea. Introduce mnemotecnia en tu salón de clases, por ejemplo, y ayuda a tus alumnos a recordar la información más difícil a través de anagramas, canciones, dibujos o mapas.
Hay diferentes recursos que te pueden ayudar. La asociación, por ejemplo para vocabulario extranjero, es muy útil asociar palabras nuevas a sonidos que ya conoces y relacionar esas imágenes, por ejemplo, para recordar la palabra good, que significa bueno, piensa en algo que te sea agradable.
¿Tienes alguna estrategia en el salón de clases para ayudar a tus alumnos a mejorar su memoria?